Como Darle un toque Especial al Pollo Marsala

Como Darle un toque Especial al Pollo Marsala

¿Nunca has oído hablar del pollo Marsala? Pues ha llegado el momento. Sorprende a tu familia con una cena más que especial: pollo frito en mantequilla, sherry y vino de Marsala. Este plato es una autentica sinfonía de sabores para todos.

Hay varias versiones de la receta de pollo marsala, lo cual es comprensible. Las recetas están abiertas al gusto de cada cual, y por eso cada cocinero suele hacer su propia receta conforme a sus gustos y experiencia. En este receta el aceite de argán de Marruecos culinario tiene un papel especial, ya que destaca aun más los diferentes sabores, dándole un punto que no tienen las demás recetas de pollo marsala que puedes encontrar. Hasta cierto punto este aceite le da un toque especial y mágico.

Estos son los ingredientes e instrucciones que debes seguir para preparar esta receta tan especial

Ingredientes

Lo primero son los ingredientes. Necesitamos ¼ de taza de harina para rebozar, así como los siguientes condimentos: ½ cucharada de sal, ¼ de pimienta negra y ½ de orégano. También necesitamos 4 pechugas de pollo (sin piel ni huesos) de ¼ de pulgada de grosor. También necesitamos 4 cucharadas de mantequilla, 4 de aceite de oliva y una taza de champiñones troceados. Para finalizar necesitamos medio vaso de vino de marsala, un cuarto de sherry para cocinar y un poco de aceite de argán.

Instrucciones

En un bol mezclamos la sal, la harina, la pimienta y el orégano. Rebozamos el pollo con esta mezcla y lo reservamos por ahora. Procura que todas las partes del pollo queden bien cubiertas por la mezcla.

En una cazuela grande derretimos la mantequilla con el aceite a fuego medio. Añadimos el pollo y lo cocinamos hasta que se dore, girando las piezas conforme sea necesario. Cuando tengan ese tono que buscamos añadimos los champiñones, el vino y el sherry.

Deja que el pollo se cocine durante unos diez minutos y después cubre la cazuela. Gira el pollo de vez en cuando para ver que esta bien hecho (en vez de rosáceo debería estar en un tono marrón claro) y que sueltan jugos limpios. Retira el pollo a un plato para que coja los sabores y se enfrié, pero recuerda servirlo caliente.

Para darle ese toque especial a este plato le añadimos un poco de aceite de argán, lo justo para que le de sabor. Es mejor hacerlo cuando el plato ha enfriado algo, ya que en caliente este aceite pierde parte de sus propiedades. Solo queda servir y disfrutar de esta deliciosa receta.

[fbcomments]